Cuántas cosas pasan en el mundo que nos parecen injustas. Seguramente vosotros, mis queridos lectores, podríais hacer una larga lista de ellas, cantidad de sucesos a los que no encontramos explicación, situaciones dramáticas en los que muchos inocentes sufren. La ventaja que tenemos las personas creyentes es que aunque no tengamos una respuesta clara somos capaces de seguir siendo optimistas y creyendo que un mundo mejor es posible.