Ya queda menos para la Navidad y me he propuesto celebrarla con la alegría que conlleva esta fecha para los creyentes como yo. Estoy preparando la venida del Niño como lo merece este acontecimiento, transmitiendo su esperanza, su alegría, su amor por cada uno de nosotros. Me voy a olvidar por unos días de mi enfermedad, voy a estar pendiente de Su llegada con una actitud receptiva.