Ya quedan pocos días para volver a la ciudad y hoy hago balance de los dias pasados en la casa de la playa, de los baños en el mar y puedo decir con claridad y certeza que han sido provechosos. Hoy quiero agradecer a Jesús su compañía en cada instante de mi vida por todas las veces que acudí a Él para captar a través de sus ojos lo que los míos no eran capaces de ver.