Aunque ya han pasado cinco años desde que me dio el ACV,todavía no tengo la seguridad a la hora de caminar sola,sin muleta ni bastón,pero sé que voy a conseguirlo con la ayuda de los míos, pues todavía me siento como una niña pequeña a las que sus padres enseñan a andar confiada en que llegará el dia en que lo conseguiré si dedico cada día un tiempo a ello.