Acabo de terminar la sesión de fisioterapia y lo he dado todo para hacer lo que mi fisioterapeuta me exigía,que no es poco.No es que me crea la super mujer,pero es verdad que he gastado toda mi energía para conseguir lo que quiero,porque no hay otra manera de hacer las cosas ,de igual forma que si echamos una mano a quien más lo necesita ,entonces Dios nos lo devolverá.