Las personas tenemos cierta tendencia a buscar la felicidad en los lugares donde tenemos una escasa posibilidad de encontrarla,pero insistimos e insistimos hasta que un día descubrimos que no sabemos a ciencia cierta lo que buscamos.Yo soy una gran buscadora,pero se acabó,pues ya he encontrado la casilla de salida,ahora solamente tengo que seguir el camino,aquel por donde transita Jesús y seguirle… y entonces dejaré de buscar.