Esta mañana,cuando estaba desayunando,tuve que ir a la despensa a buscar la lata de los cereales,pero mi inseguridad propia de la mañana provocó en mi un miedo que me impidió pensar con claridad y sentirme impotente y desilusionada,provocando en mi el llanto por esa sensación de incapacidad,llevándome a preguntarme hasta cuándo voy a sentir ese miedo.No lo sé,esa es la pura realidad,lo que si sé es que cada vez que me ocurra haré lo que hice hoy,hablar con Dios para que me consuele con sus palabras y me quite el miedo.