¿Os imagináis lo felices que podríamos ser si cada instante de nuestra vida viviésemos con la tranquilidad y la confianza de un niño que se sabe protegido por sus padres? . El niño sabe que nada le pasará si obedece a sus progenitores y conoce la recompensa cuando así lo hace. Ya soy adulta y la vida me ha enseñado muchas cosas , pero sé que tengo que seguir aprendiendo si quiero lograr mi meta y ser independiente ,así que mientras tanto viviré como lo hace un niño : con la confianza de que si obedezco a mi Padre la conseguiré y esa será mi recompensa.