Sigo siendo bastante inquieta ,me cuesta estar sin hacer nada y como consecuencia presiono a los míos para hacer las cosas rápido y claro ,luego me regañan con toda la razón del mundo, y yo me enfado .Es muy duro querer hacer y no poder , es muy frustrante pero me digo una y otra vez que ya llegará el momento en que lo consiga. Sí , el mal tiene mucho poder pero Dios tiene mucho más y sé que si confío en Él venceré al mal cada vez que me tiente con sus engaños y con sus intentos de convencerme de lo que es mejor para mí .Yo ya sé lo que es mejor para mí :aquello que es bueno también para mi prójimo y cuando actúo de esta manera soy yo la que tengo el poder